Complejidad, sencillez, liviandad, fobia, visiones y muchas cosas mas, guardas en tu infierno, que reflejado en una nube es igual a la textura de la misma, simple de entrar, pero muy difícil de salir, tanto, que solo un volador de sueños podría tener la ligereza de una gravedad escasa como si pesaran los demás, demás que son solo eso de más.
Cuando lo creído es creído de una parte de tu alma, se transforma en mentira y se vuelve luz del mas allá, que no se entiende, pero emerge un sonido que al entrar en tus oídos endulza ese limón agrio y lo deja como un caramelo favorito o un tequila en perfecto punto.
Tu cielo y mi infierno de claridades, no se creen entre si, no crean ningún mundo imaginario, sino el real disfrazado en plenitud y escondido como un amigo imaginario, que solo lo ve el que se lo imagina, pero no hay que ser un soñador para tal cosa, ni llevar planos de tu conciencia, solo hay que mirar y observar con plenitud... Sombras agonizan en simples casos de mediocres claridades y llegado al tiempo, las sombras se convierten en oscuridad y esta misma en un espejo, por que solo veras sombras reflejadas de esa oscuridad a cada paso de un latido en tu consciencia.
"El cielo no se llega nunca de a dos" Yo creo que hay una forma de llegar, pero no hay seguridad de por cuanto te quedes, pero la pena que vale es inimaginable. Cielos que cubren tu mirada hacia arriba, cielos acuáticos, que reflejan locuras de humedecerse en labios, labios apasionados por letras con cierta grandilocuencia y siderales con realidades avanzadas.
Tu cielo enfermo de lluvias y presiones bipolares, no agranda la plenitud del mismo, aunque atines con la fuerza y desquebrajes mi suelo llevándome al abismo...
Significa, pero su maldita vez no....
Atte: Andres...
